Inteligencia artificial y herramientas de toma de decisión

Para nosotros, en la Unidad de Innovación del Hospital Clínico San Carlos, la tecnología de la información debe ofrecernos, a través del uso de «machine learning», minería de datos e inteligencia artificial, herramientas para la toma de decisión de:

1. Pacientes
2. Clínicos
3. Gestores

En esa línea estamos trabajando y esperamos poder ofrecer alguna prueba de concepto a final del segundo trimestre de 2015.

Atheism vs Religion

I must confess I enjoy Richard Dawkins’ debates and talks on atheism and religion.

Whether he is an atheist, non-theist, non-believer, or agnostic, he knows that irritation is the best kind of stimulation.

I find Dawkins highly entertaining, but there are some arguments he never uses when denying the existence of god: an omniscient, omnipotent and omnipresent god should be intellectually approachable by any means. If reason does not work to explain God… a contradiction in terms arises…

Eleanor Rigby, la gente solitaria y la historia clínica electrónica.

Eleanor Rigby entró por la gran puerta de urgencias del hospital. Desde allí miró a la gente solitaria que esperaba en una gran sala.

Cuando llegó su turno, recogió el bolso y se sentó frente al Dr. McKenzie. Ella le puso la cara que guardaba en un tarro, junto a la puerta. Nunca supo para quién la ponía.

Mientras, se preguntaba: Y toda esa gente solitaria, ¿de dónde viene? Y toda esa gente solitaria, ¿de dónde es?

El Dr. McKenzie levantó la mirada y leyó en su memoria las palabras «¿Qué le pasa?» «¿Desde cuándo?» «¿A qué lo atribuye?»

Y ella le respondió, mientras él miraba el teclado:

– Le contaré mi historia. Pero no quiero que la guarde en ese ordenador.

El Dr. McKenzie no pudo creerlo. No habían pensado en una historia clínica que no fuera electrónica. Y menos en una persona solitaria, que no quería su vida en ninguna base de datos automatizada. Pero la ley estaba de su parte. Ella podía negarse.

Eleanor Rigby murió en el hospital y la enterraron con su historia en papel. Nadie fue a su funeral. Excepto el Dr. McKenzie, que limpiaba una tumba donde se leía:

Eleanor Rigby, una persona solitaria, sin historia clínica electrónica.