Luz de la Luna

Recorrer la ciudad de noche es una aventura. Nunca sabes lo que puedes encontrar. Quizá una estatua herida por un rayo. O la Plaza de Oriente golpeada por la luz de la Luna.

Sólo los que están preparados para mirar pueden ver. Sólo los que están deseosos de vivir lo sienten.

Sin retorno

Andar en chándal por El Retiro. Despreocupadamente. Como si nada fuera a cambiar. Como si el instante fuera a durar para siempre. Sin conocerles. Sin conocerme. No saben que les han capturado digitalmente en el momento sin retorno en el que atravesaban la puerta de salida del Palacio de Cristal. Se amarán. Se odiarán. Seguirán juntos para siempre. O no. Pero la captura de este momento perdurará en el tiempo sin que ellos lo sepan jamás.

Perspectiva

Toda realidad tiene infinitas perspectivas. No todas iguales. A veces incoherentes. Unas feas. Otras bonitas. Yo tengo la mía. Que no me impide disfrutar de otras, brillantes, sarcásticas, divertidas, paradójicas, surrealistas.

Fatiga social

Estar disponible, todo el día, a todas horas, en cualquier lugar, es el signo de los tiempos. Y todo para casi nada, casi siempre. Para oír lamentos, escuchar penas, responder a solicitudes vanas. Hay que aceptarlo. Somos así. Miedo, envidia y fantasía nos mantienen funcionando.